En Valdemorillo se encuentra la granja Burrosdiversia que ofrece la posibilidad a pequeños y mayores de pasar un rato muy especial en contacto directo con animales, con los que además es posible interactuar de una forma natural y segura.
No guió en esta visita Álvaro, quien fue todo amabilidad desde incluso antes de llegar, ya que nos recibió a la entrada del terreno, indicándonos dónde aparcar. Después nos acompañó en esta visita por la granja, en la que pasamos por gallinas, patos mudos, cabras, burros…


Los niños pueden alimentar a los animales, entrar al recinto en el que ponen los huevos (en este caso, algunos de ellos azules), acariciar a las cabritas, y lo mejor, peinar a los burros y dar un paseo tranquilo a lomos de alguno de ellos.

A pesar de que esto no es una granja escuela, (como es el caso de la granja escuela el Álamo) ya que los animales se encuentran en libertad y las personas pueden interactuar con ellos, durante la visita Álvaro nos contó curiosidades y detalles sobre los animales de una manera muy amena y divertida, por lo que los niños (y los adultos) se van a casa sabiendo un poco mas sobre ellos.
La guinda del pastel la pone sin duda el entorno, un paraje natural en el que se encuentra inmerso la granja, y del que disfrutaremos paseando a lo largo de la visita. En definitiva, un día inolvidable en la naturaleza.


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