Conocer las principales ciudades de Bélgica en 4 días es perfectamente factible. Una escapada al corazón de Europa que se puede realizar en cualquier puente o fin de semana largo sin mucho esfuerzo ya que es muy fácil de organizar.

En mi caso en este viaje de 4 días (5 si contamos el desplazamiento) pude visitar Bruselas, Brujas y Gante bastante bien, gracias a la que los desplazamientos por Bélgica con rápidos y sencillos por la buena red de transportes con la que cuenta el país.

Las claves para aprovechar el tiempo al máximo son: ubicación y transporte.

Alojamiento en Bruselas

Me alojé en Bruselas, ciudad a la que de dediqué dos días casi completos. Desde allí me desplacé en tren a Brujas y otro a Gante, volviendo en el mismo día a dormir a la capital. El alojamiento que escogí en Bruselas fue el B&B Aquarelle. Este bed&breakfast familiar no solo fue muy asequible económicamente sino que la hospitalidad de los anfitriones y la calidad del alojamiento lo convirtieron en uno de los lugares más acogedores en los que me he alojado. Las habitaciones, además de la estancia propia de la cama y el baño, contaban con un saloncito de tamaño mediano, en el que cabían un sofá, una TV y una mesa de centro. Esta estancia me pareció muy útil, no solo por la mayor amplitud que daba al alojamiento sino para el caso de una noche en la que no tienes ganas de salir a cenar y decides pedir comida a domicilio. Otro punto a destacar era el salón comedor común en el que los huéspedes desayunábamos. Decorado con mimo y detalle, en él se servía un desayuno completo del que hay que destacar los croissants, los mejores que he probado sin duda.

La lástima es que por lo que he visto en internet, actualmente aparece cerrado, seguramente debido a los estragos que la Covid-19 ha causado en este tipo de alojamientos turísticos pequeños. Pero no he querido dejar de reseñarlo por si tras la recuperación de la crisis vuelve a abrir sus puertas.

Este alojamiento estaba en el barrio de Saint-Gilles, que aunque está algo más alejado del centro, es uno de los más económicos de la ciudad.

Barrios en Bruselas hay muchos, pero una recomendación, especialmente en el caso de hacer un viaje corto, es alojarse cerca de la estación de Bruxelles Central, de la que salen la mayor parte de los trenes a las distintas ciudades. Por otro lado, en la ciudad de Bruselas, si bien hay bastantes cosas que visitar a las afueras, la mayoría de los lugares de interés turístico se concentran en torno a la Grande Place, por lo que un alojamiento cerca de ésta puede ser también una buena idea.

Desplazamientos desde Bruselas

A pesar de que existen otros medios de transporte, lo mejor para moverse entre ciudades sin duda es el tren. En una hora o menos es posible llegar a la mayoría de las ciudades de interés de Bélgica desde la capital. Los trenes en Bélgica destacan por su comodidad y rapidez. Y como digo, la mayoría de ellos tendrán salida desde la estación de Bruxelles Central.

Respecto al billete o bono que debéis escoger para vuestro desplazamiento, existen distintos tipos y escoger entre uno u otro dependerá de cuántos viajes tengáis planeado hacer, la edad, cuántos viajéis…. Por eso en este caso es una buena idea tener más o menos claro qué ciudades queréis conocer para adquirir el tipo de billete que más os conviene.

Por ejemplo, los menores de 12 años no pagan billete, y los menores de 26 así como los mayores de 65 cuentan con billetes a precio especial. También existe un bono de fin de semana, que cuesta la mitad de precio que el normal.

Una opción que puede ser muy buena para un grupo de amigos, o para una pareja que vaya a realizar varios desplazamientos en tren, es el Rail Pass, un “bono de 10 viajes” para mayores de 26 años que puede ser compartido por varias personas. Es decir, no es necesario comprar un bono por persona, sino que el mismo bono puede ser utilizado por diferentes personas. Cuesta 83€, por lo que puede compensar en un momento dado. Por ejemplo en nuestro caso, al ser dos y visitar únicamente 2 ciudades (y teniendo en cuenta el precio de cada desplazamiento), no compensaba cogerlo, por lo que adquirimos billetes normales cada día.

Es posible consultar todas las opciones disponibles para vuestros desplazamiento en Bélgica aquí, donde puedes adquirir los billetes también online.

Bruselas en 2 días

Mis expectativas sobre Bruselas eran bastante bajas la verdad. Y creo que esto es algo que le pasa a mucha gente. De algún modo hemos creado en nuestra mente una imagen algo gris y seria de esta ciudad, que sin duda cambia una vez que la visitas, especialmente si tienes la suerte de contar con buen clima. Como la mayoría del interés turístico está bastante concentrado, lo mejor es visitar Bruselas caminando. No obstante, para puntos concretos, (como podría ser el Atonium) el metro es una buena opción

Una buena forma de comenzar nuestra andadura por Bruselas es ir directamente a La Grand Place, una maravillosa plaza que alberga un conjunto de edificios del siglo XVII entre los que destaca el majestuoso Ayuntamiento. Te tirarás un buen rato tratando de encontrar el ángulo para sacar una foto completa de este edificio!

Bruselas es una ciudad cargada de monumentalidad, y hay otros edificios que merecen la pena ser visitados, como la preciosa Catedral de San Miguel y Santa Gúdula, o la iglesia de Notre Dame Du Sablón.

Las Galerías Saint Hubert son sin duda otro de los puntos a destacar de la ciudad; recorriéndolas se te hará la boca agua con las tiendas de chocolate belga más delicatessen.

• 

• 

Si el tiempo lo permite,  pasea hasta los jardines de Mont des Arts, que te sorprenderá con una de las mejores unas vistas de Bruselas.

Por supuesto, no podéis iros de la capital sin hacer una visita al Mannenken Pis. También situada en el centro histórico, este simpático niño de bronce es la atracción turística más típica de Bruselas, y los bruselenses juegan con ella en función de los acontecimientos que se den en la ciudad en ese momento, o el día que sea. Cuando yo fui me tocó verlo disfrazado de médico cardiólogo.

Pero si no te da tiempo a visitarlo no te preocupes porque te encontrarás pequeñas réplicas caminando por los rincones de la ciudad, por ejemplo, como reclamo en la puerta de las tiendas de souvenirs.

• 

• 

Del Mannenken Pis se han hecho diferentes versiones, yo me encontré por casualidad con este Zinneken Pis o perro meón, al lado del edificio de la bolsa, que me pareció lo más original y divertido de Bruselas. Después descubrí que este perrito representa el espíritu del Zwanze (humor típico Bruselense) También hay una versión femenina, la Jeanneken Pis, que no llegué a ver pero que también está cerca de la Grande Place.

Si aún os queda tiempo, o si disponéis de un día más para alejaros del centro, podéis acercaros al barrio de los edificios europeos, al Palacio Real , la Basílica del Sagrado Corazón o al Atonium.

Pero si tu tiempo es limitado y no sabes qué elegir mi consejo es que pasees por las calles de Bruselas y te dejes sorprender por sus rincones. No obstante, hay algunas cosas que no te puedes de la ciudad.

Imprescindibles de Bruselas

La ruta del cómic

Bruselas es la capital europea del comic, te darás cuenta por los muchos y variados graffitis que te encontrarás en tus paseos por la ciudad y que hacen honor a este título. Dibujos bien hechos, que dotan a la ciudad de un color y ambiente vanguardista únicos. Gracias a estos dibujos descubrí que personajes como Tintín o Los Pitufos son belgas.

Tomar una cerveza en el Delirium Tremens

El café Delirium Tremens (Calle Impasse de la Fidelité 4) es famoso por la variedad de cervezas que ofrece. Este hecho es el que le hace formar parte del libro Guinness de los Récords, por lo que no puede faltar en tu visita a Bruselas. Además, si hace buen tiempo podrás disfrutar de la cerveza en una pequeña terraza que colocan en el coqueto callejón en el que se sitúa el local. Un rato agradable que sin duda quedará entre los mejores recuerdos de tu paso por Bruselas.

Probar los gofres y el chocolate belgas

Poco se puede decir sobre el chocolate belga… especialmente untuoso y sabroso y con una fina textura, el chocolate belga lo que hay que hacer es probarlo!

Las patatas fritas belgas «Frites»

Sorprendente, pero las patatas fritas  (Frites) son famosas (y mucho) en Bruselas y te encontrarás puestos a lo largo de la ciudad. Yo he de decir que no me parecieron nada del otro mundo, pero sirven para matar el hambre del turista y continuar tu visita sin sentarte a comer.

Los mejillones belgas (Moules-frites)

Otra de las grandes sorpresas de la ciudad… Los mejillones son una comida típica de Bruselas, y hay calles repletas de restaurantes que ofrecen este producto. Si tienes la suerte de que hace buen tiempo, puedes disfrutar de este plato típico en una de las terrazas de estas concurridas calles. Los mejores mejillones se dan entre mayo y agosto, justo la temporada más turística, así que a disfrutar!

• 

• 

Ahora me doy cuenta de que de los 5 imprescindibles que he mencionado, 4 son comida/bebida… pero es que la gastronomía es una parte fundamental de este viaje!

Un consejo importante en este sentido, cuidado con la hora de la cena! Como te descuides, en Bruselas no cenas. Si quieres cenar tranquilamente en un restaurante después de un largo día de turismo, planifica esto con antelación, porque los restaurantes cierran bastante temprano en comparación con España.

Un día en Brujas

Brujas está a una hora en tren desde Bruselas, saliendo también desde la estación de Bruxelles Central.

Nada más salir de la estación de Brugge, y como puerta de entrada a la ciudad , te espera el Parque Minnewater. Un precioso parque con un lago (Lago del Amor) en el que disfrutar del paisaje y hacer fotografías en una ambiente sosegado. Los cisnes, que son emblema de la ciudad de Brujas, te acompañarán en este bonito paseo.

El Lago del Amor está unido al sistema de canales de brujas, y teóricamente como su nombre indica, se debe acudir aquí con alguien a quien amas, pero que yo recomiendo recorrer por un tiempo, estés con quien estés, porque va a ser igual de bonito y no te lo puedes perder.

Brujas es probablemente la ciudad de Bélgica que atrae a mayor número de turistas, por el encanto de sus canales y sus pintorescos edificios. De nuevo, mi recomendación para conocer la ciudad es recorrerla caminando, disfrutando de tranquilos paseos a lo largo de sus canales (si quieres, y aunque parezca una “turistada” puedes incluso dar un paseo en barco por alguno de ellos ya que estás allí)

Paseando por Brujas te encontrarás con rincones encantadores como el Muelle del Rosario, el que dicen que es el lugar mas fotografiado de Brujas.

Pero además, Brujas ofrece otros lugares encantadores que se pueden visitar en un día y que no debes perderte, como la preciosa plaza Grote Markt, con el campanario Belfort. Recomiendo verla desde arriba, aprovechando para tomar un café o una buena cerveza belga en alguno de los locales del piso superior de los edificios de la plaza.

Un día en Gante

A media hora desde Bruselas se encuentra esta monumental y encantadora ciudad belga. He de destacar que si Bruselas me sorprendió, Gante lo hizo aún más. Para llegar a la zona céntrica de la ciudad es necesario coger un tranvía desde la estación. Cuando me bajé del tranvía y según me iba acercando al centro de Gante, con sus preciosos canales y la Catedral de San Bavón enmarcada al fondo, me pareció que entraba en una ciudad de cuento.

Si los canales de Brujas son bonitos, los de Gante no le tienen ninguna envidia…  si además coincide que es un día soleado, te sorprenderá el ambiente que se forma alrededor de los canales, repletos de gente aprovechando el día de sol.

Pasear, tomar una cerveza o lo que sea en alguna de las terrazas de alrededor, es la mejor manera de pasar una maravilloso día en esta ciudad.

Pero aparte de los canales, Gante destaca por la cantidad de edificios históricos que posee, por ejemplo, la Iglesia de San Nicolás. También es posible subir al Campanario Belfort para disfrutar de unas increíbles vistas de la ciudad. O pasear por la plaza de Vrijdagmarkt.

Yo no tuve tiempo de más, pero dejo para mi próxima visita un paseo por el barrio medieval de Pathersol o por la zona del Street Art de Gante.

Como veis, aunque se puede hacer una visita bastante completa a Bélgica en unos pocos días, sus ciudades están tan cargadas de arquitectura e historia, y los paisajes que dibujan los edificios, los canales, parques, puentes y rincones especiales son tantos, que da para una segunda o tercera visita. Además, es un país muy asequible para visitar con niños, por el orden general y la comodidad y rapidez de sus desplazamientos.