Para circular con tu propio vehículo en Marruecos, además de obtener todos los documentos necesarios, que puedes consultar aquí, tendrás que meter el coche en uno de los ferrys que atraviesa el estrecho hasta Marruecos. En este sentido tienes dos opciones, salir desde Tarifa o desde Algeciras. En nuestro caso partimos desde Algeciras, por lo que desconozco cómo sería el proceso desde Tarifa.

Comienzan nuestros errores:

1.- Atravesar el estrecho en ferry a finales de julio: a pesar de que teníamos los tickets del ferry ya reservados previamente a través de la página web (existen varias páginas donde puedes reservar tu ticket, nosotros utilizamos Directferries), con el horario de entrada al ferry etc., nos encontramos con una larga fila de coches para acceder al barco. La mayoría de ellos era marroquíes que viajaba a sus hogares para pasar el período estival. Por supuesto, no se respetaba el horario indicado en el ferry, simplemente se entraba cuando se podía, después de esperar al sol de julio para acceder después de todos estos coches, camiones de transporte de animales y muchas otras cosas.

Mientras tanto, la espera estaba amenizada por diferentes personas que se acercaban a la ventanilla del coche para ofrecernos servicios de gestión de trámites de todo tipo. En este sentido ya íbamos bajo advertencia, y como en nuestro caso ya llevábamos todos los documentos que necesitábamos, solo nos tocaba decir que no una y otra vez. Pero reconozco que pueden llegar a hacerte dudar y acabar «contratando» sus servicios.

2.- Circular con tu propio coche por Marruecos. Como además en nuestro caso, se trataba de un coche de renting, no nos importaba machacarlo un poco haciendo este viaje y manejarnos por las ciudades con él. Si bien los desplazamientos desde una ciudad a otra eran relativamente sencillos, ya que las carreteras no son malas y las indicaciones claras, llevando claro está un GPS, el problema vino al llegar al interior de las ciudades. Y es que en general, la circulación dentro de las ciudades marroquíes es bastante mas caótica de lo que estamos acostumbrados en España. Como decía en el post sobre cómo moverse por Marruecos, sin llegar al nivel de ciudades asiáticas del estilo de Tailandia o Vietnam, los pasos de cebra no se respetan de la misma manera que aquí, y la circulación es más intensa y caótica. Si a ello le sumamos que no conocemos las ciudades, la llegada a cada una de ellas puede resultar bastante estresante.

3.- Por último, una vez en la ciudad de destino, es necesario hablar de la conocida fama que tienen los marroquíes de perseguir turistas en busca de una forma de ganar algo de dinero. Bien, en nuestro caso, el coche era como un cartel luminosos que iba llamando la atención de todo tipo de buscadores de negocio. Tanto, que incluso a la llegada a las ciudades, ya teníamos a alguien esperando a que nos bajásemos del coche para ofrecernos servicios de custodia del vehículo, de guía turístico, etc.… no pasábamos precisamente desapercibidos en este sentido y no era para bien.

En resumen, para estar más tranquilos y poder disfrutar con más relajación de este viaje, no recomiendo utilizar el vehículo propio, por tentadora que pueda parecer la idea. Máxime cuando existen muchas otras opciones eficaces y rápidas para desplazarte por Marruecos. (consultar aquí)

Aunque he de decir, que atravesar en ferry el estrecho, una vez subidos al barco y en marcha, tuvo un punto bastante romántico, y el ferry era en general cómodo y amplio. Se puede comer, y se puede consumir alcohol en el interior del ferry.

Había bastante gente, por lo que si viajas en temporada alta como nosotros, puede que no te sientes en el lugar que prefieras, pero el trayecto es tan corto, que se te pasará volando observando el mar desde cubierta y la tierra de Marruecos haciéndose cada vez más grande a tu vista.